¿POR QUÉ EFECTUAR UN LAVADO INTERNO DE MOTOR CON EL SISTEMA FLUSH-OUT?

Desde el principio del motor a combustión interna, los fabricantes y operadores han estado preocupados por la acumulación de contaminantes en el sistema de lubricación de los motores. Estos contaminantes, conocidos como herrumbre, melcocha o barro, con el tiempo van causando serios daños a las piezas en movimiento del motor.

Dichos contaminantes se generan por:

- Residuos causados por la combustión.
- Degradación del aceite debido a su oxidación.
- Polvo, tierra y otros abrasivos.
-Agua por condensación, por combustión y/o por el sistema de enfriamiento del motor.
- Silicona.
- Partículas metálicas bien sea por el desgaste del motor o por las piezas en mal estado.
- Plomo y otras impurezas en el combustible.

Estos contaminantes en el motor obstruyen el flujo del lubricante a través de las galerías de lubricación, tapan el filtro de aceite y la malla del colector de la bomba de aceite. Los contaminantes del motor también contienen miles de partículas en suspensión que aumentan la fricción, desgastan el motor y literalmente le roban al motor potencia y años de vida.

Los cambios frecuentes de aceite; los lavados internos químicos; los cambios inmediatos de aceite, simplemente no pueden eliminar partículas y contaminantes en el motor, ya que siempre quedará al menos 1/2 litro de aceite usado remanente.

¿Cuando se recomienda hacer lavado de motor con flush out?

- Cada 7 000 a 10 000 km (con más frecuencia en vehículos utilitarios)
- Después del periódo de asentamiento de un motor nuevo o de recien ajuste.
- Cuando se cambia de aceite mineral a sintético.
- Después de cambio de aceite demorados o poco frecuentes.
- Cuando el aceite ha sido contaminado por agua, gasolina u otros.
- Después de reparaciones como cambio de empaques o juntas y para extraer la contaminación por agua.